EL MÓVIL DEL CRIMEN
Ha dicho el juez entusiasta
que basta de móvil, ¡basta!,
y los adeptos de Franco
pensando que dio en el blanco
gritan: ¡vale la canasta!
El tío de Calatayud
famoso por la virtud
de ver en las niñas putas
anda en busca de disputas
nuevas con la multitud.
¡Que así le sube al gaché
a las nubes el caché,
se disimula la trama,
se limpia un poco la fama
y se gana más parné!
Que mientras los niños gimen
pues los hombres los oprimen
con guerras, hambres y horrores,
para este juez de menores
no es ese el móvil del crimen.
Jesús María Bustelo Acevedo
Tu nariz me hace feliz, emperatriz de la matriz y la motriz
TU PEQUEÑA NARIZ APUNTA AL INFINITO
Tu nariz va empinándose hacia el Cielo...
Ese extraño empinarse, ¿qué me evoca?...
¡Mejor en esto cállate la boca,
Jesús María Bustelo!
Ese raro elevarse a las alturas
de tu breve nariz coqueta y fina
no es como aquella elevación divina
ni cual la varonil de envergaduras...
Tiene mucho de tierno y femenino,
aunque tengas el gesto tan severo
que parece el de un coronel austero
que una bélica arenga a darnos vino...
Y torpe y tristemente escribo esto
sobre esa miniatura de nariz
sólo para ocultar que fui feliz
cuando íntegro me enamoré del resto
y cuanto no es el resto: tu nariz.
Jesús María Bustelo Acevedo
Tu nariz va empinándose hacia el Cielo...
Ese extraño empinarse, ¿qué me evoca?...
¡Mejor en esto cállate la boca,
Jesús María Bustelo!
Ese raro elevarse a las alturas
de tu breve nariz coqueta y fina
no es como aquella elevación divina
ni cual la varonil de envergaduras...
Tiene mucho de tierno y femenino,
aunque tengas el gesto tan severo
que parece el de un coronel austero
que una bélica arenga a darnos vino...
Y torpe y tristemente escribo esto
sobre esa miniatura de nariz
sólo para ocultar que fui feliz
cuando íntegro me enamoré del resto
y cuanto no es el resto: tu nariz.
Jesús María Bustelo Acevedo
Suscribirse a:
Entradas (Atom)